viernes, 4 de enero de 2008

¿RUDOLF?

Esta también va de escaparates.
No entiendo muy bien que quiere expresar, estos maniquís con cuernos redondos y narices rojas, son un acercamiento del ser humano a la naturaleza y a las costumbres navideñas o es una oda al consumismo de estas fechas.
Pues consumamos como cabrones que ya falta poco para que se acaben las navidades...

1 comentario:

Anónimo dijo...

es increible; Colapso absoluto en las tres vias que van a nuestros ilustres hipermercados y, mientras, nuestros niños sueñan con opulentes regalos que les hagan pensar que en este mundo todo es fácil, cercano, no frustrante...¡así nos va!